Política
Sacerdote misionero contra la misa de desagravio al Papa Francisco
Tras la misa de desagravio al Papa Francisco que realizaron los “curas villeros” de Buenos Aires, el padre Marcelo Miguel Szyszkowski escribió en su cuenta de Facebook una columna explayándose en contra del repudio realizado por los ya mencionados pastores, que a él no lo representan.
El pastor, en comunicación con Ciudadanos, expresó: “En primer lugar, estas líneas que escribí estos días pasados hablan, en primer lugar, de que no podemos bastardear, ocupar lo más sagrado, hermoso, lo más bello que tenemos: el don y el regalo más grande de Dios, que es el sacrificio de Cristo. No para condenar, ni para etiquetar a nadie, ni mucho menos para desagraviar. Cristo no murió para desagraviar ni para condenar a nadie en la cruz; eso es el punto central. Entonces, no podemos usar lo más hermoso, lo mejor que tiene el ser humano, que es el lugar donde todos nos encontramos, para decir quién es bueno y quién es malo. En el fondo, es eso”.
Acerca de su postura política, remarcó: “En ningún momento estoy tomando postura política. Incluso en el escrito dice clarísimamente que ninguno de estos representantes, ninguno de estos políticos, incluso ni Milei me representa, o sea, nadie va a representar. Explícitamente dice: ‘Ninguno de los candidatos me representa’, y esto simplemente estoy haciendo desde la fe porque la Iglesia no está para condenar a nadie”.
Además, especificó: “Puse el ejemplo de que las mismas Abuelas de Plaza de Mayo hicieron, cuántas veces marcaron y mancharon con su mierda la catedral, y el Papa las recibe estando en Roma, las abraza, hay acogida, no hay condena, no hay desagravio, no hay nada. O sea, porque para uno sí y para otros no, entonces no entendimos el gesto del Papa que las recibió allá”.
Ante la consulta de en qué sentido hizo la carta, el padre Szyszkowski dijo: “Primero, para no traspolar de ámbito, o sea, no hacer el salto ontológico de una realidad a la otra. Los dichos marketineros, porque hablar mal del Papa también te da marketing, esos se dicen en algunos medios de comunicación y en las redes. No puedes trasladar desde la farándula o desde la chicana que hay en varios medios, trasladarlo al ámbito religioso y cultural. Estamos pasando del ámbito de la chicana y de las farándulas al espacio sagrado, y eso no se puede hacer, o sea, ahí está grave. Bajarse al mismo canal donde estuvo ese tipo. Haz una marcha, haz un acto, lo que tú quieras, pero no una misa”.
También, el padre remarcó que nadie lo llamó para repudiarlo: “Nadie me llamó a criticarme. Incluso los obispos que me escribieron, la mayoría de los curas, me agradecian porque es cierto que a veces estamos corriendo de acá para allá. Hay cosas que no nos gustan, pero tenemos que seguir para adelante. Pero nadie se anima a escribir o a decir algo, o sea, no es que no se animen, no hay ni tiempo para pensar y decir, “me tomo un rato y pienso bien qué voy a poner’, o sea, porque hay que tomarse ese tiempo. Entonces, hay que agradecer que puse en palabras cosas que muchos querían decir, pero nada más que eso”.