salud
La importancia del apoyo terapéutico para tratamientos de fertilidad asistida
Pocas situaciones hay tan estresantes como las de las parejas que acuden al especialista a buscar los resultados de sus pruebas de fertilidad. Las personas que se someten a un tratamiento de reproducción asistida lo hacen ya de por sí con una enorme carga de ansiedad acumulada en la mayoría de los casos. Han pasado tiempo buscando el embarazo de manera natural, sin lograrlo, después han pasado por pruebas para ver dónde radicaba el problema y si existía una solución. Por último, han decidido ponerse en manos de especialistas para pedir ayuda.
El apoyo terapéutico resulta imprescindible en este tipo de consultas para lograr el objetivo.
La psicóloga Daniela Zelada nos contó acerca de lo que se aborda en estas sesiones terapéuticas: “Yo quise enfocar en estas cuestiones, precisamente en el sentir del varón y sobre todo cuando el diagnóstico tiene que ver con un factor masculino. Tengo el testimonio de un paciente, lo invité a participar y él escribió: “Al momento de decidir tener un hijo, comenzamos un camino donde sabíamos que nuestra vida cotidiana iba a cambiar, enterarnos mediante estudios médicos que las posibilidades de embarazo eran muy bajos, Oligospermia severa, nos hizo replantearnos la posibilidad de ser padres”.
Agregó: “Los médicos nos explicaron que pese el diagnóstico, el embarazo es viable mediante fertilidad asistida, el cual consiste en diferentes procedimientos y etapas, que las probabilidades de un embarazo son inciertas, toda esta información nueva para nosotros nos generó en primer lugar una posibilidad de esperanza, de poder empezar a creer que la vida, la idea de tener un hijo era posible. La realización del tratamiento de fertilidad asistida generan nosotros diversas clases de emociones, en ocasiones positivas y en otras negativas, descubrimos que abordamos este proyecto de tener un hijo y nos une más como pareja para poder canalizar y, manejar mejor las diversas sensaciones, emociones de felicidad, ansiedad, tristeza, esperanza y miedo”.
Continuo: “Como si estuviéramos en una montaña rusa al momento de iniciar estudios psicológicos que forman parte del tratamiento de fertilidad, teníamos ciertas dudas sobre si realmente ir con un profesional de la psicología iba a resultar beneficioso o importante, estábamos muy centrados en los aspectos de estudios médicos biológicos, sin embargo, nos dimos cuenta que este espacio de contención y la escucha era una pieza fundamental que nos faltaba para poder manejar de mejor manera. Que era mezcla de emociones y fortalecernos como pareja las charlas en este lugar de acompañamiento terapéutico son de mucha importancia para nosotros, porque representan un espacio donde podemos hablar sobre lo que nos ocurre en los diversos estados que atravesamos en este sueño de ser padres, como pareja podemos decidir que las herramientas que logramos construir mediante el apoyo psicológico nos permite tener una visión más positiva de todo y, redescubrir la importancia que tienen los vínculos y espacios de contención para vivir el desafío de la búsqueda de nuestro hijo de la mejor manera posible”.
La licenciada contó sobre esta pareja: “esta es una pareja que tiene muchísimo compromiso, ellos son del interior de la provincia y vienen quincenalmente desde el interior, o sea, reorganizaron todo su agenda para venir a mi espacio, con psicología y también al espacio de nutrición. Mejoraron dieta, mejoraron rutinas mejoraron un montón de cuestiones en pos de esto y lo que nosotros venimos trabajando mucho esta cuestión de hacer lugar a este nuevo ser que ellos desean que lleguen”.
Además, la licenciada Zelada contó para que sirven estas sesiones “el espacio terapéutico de psicología es un espacio que tiene cierta resistencia. Los pacientes dicen “¿por qué me mandaron?” muchos pacientes llegan y no saben por qué los mandaron. En realidad es todo lo contrario, es poder brindarles un espacio donde ellos puedan canalizar de la mejor manera posible todos sus miedos, todas sus angustias, todo lo que conlleva este camino, algunas veces por el impacto emocional del diagnóstico, vienen como muy aturdidos y uno hace como un repaso de cuál va a ser el procedimiento que van a llevar adelante, te das cuenta que todavia no comprendieron bien, entonces poder reeducarlos en ese sentido también. Va a consistir en esto, explicarle como se hace, cuáles son los pasos, por eso la importancia de que las profesionales que trabajamos ahí somos toda psicólogas especializadas en Reproducción Asistida, por eso tenemos cierto manejo de este circuito médico que ellos tienen que poder enfrentar para llegar a concebir un hijo y poder acompañarlos en qué implica”.
Sobre las consultas que los pacientes llevan a las sesiones: “muchos pacientes nunca pasaron por un quirófano por ejemplo y no hay por qué pasar por un quirófano para llegar a estas distancias, entonces explicarle eso, explicarle en qué consiste la técnica, qué va a ser ambulatorio, que no, que se va a necesitar, si se quiere alguna anestesia, todas esas cuestiones para prepararlos para que ese día cuando se encuentren en plena intervención no se asusten. Entonces el caso por caso y cada pareja, cada persona, por supuesto también trabaja sus cuestiones. Hasta te podría decir sus vínculos con sus padres, sus vínculos con la pareja, toda la historia familiar, todos como te digo, todos se mueve en función de hacer lugar a ese nuevo ser que deseamos que llegue”.